HISTORIA DE UNA SEMANA
El domingo estuve viendo la película de Milenium, que es normalita y un poco violenta para mi gusto.
El lunes por la tarde conocí a Gabriela una enferma de Corea que es muy afín a mí y mis gustos.
El martes compartí la logopeda con Miguel. No le veía desde el curso de verano. Nos abrazamos y charlamos un montón. Para mi fue una tarde genial.
Comprobé como cada enfermo tiene su vida y su enfermedad es diferente a la mía. El todavía conduce y yo hace dos años que no puedo hacerlo ya. Pero nuestro corazón y nuestro amor a la vida sigue siendo el mismo.
El miércoles por la tarde después de la fisio, estuve en el neurólogo y aunque ya le conozco, resulto tan patético y tan hiriente conmigo que me destroza. Ahora entiendo que no pueda el hacer ningún informe sobre como se desarrolla la enfermedad de respecto a la falta de atención y quiere que vaya a un psicólogo a que me haga un informe al respecto.
Y como siempre he encontrado el apoyo de la Asociación y vamos a conseguir el informe como sea.
Ayer se me volvieron a dormir las manos un montón.
El viernes estuve desayunado con mi amiga “La Garci”. Después compre mis pastillas y me fui a ver una exposición de esculturas de madera al Arco de Santa María”. La había visto el otro día con mucha gente y me había gustado. Aproveche para ir por la mañana y pronto y pude disfrutar de ellas de verdad. Es buenísimo y es una obra completa.
Porque lo normal de una exposición de pintura o de lo que sea, se refleja lo último de cada artista y sus obsesiones temporales. Pero este no es así. Y como es captar la esencia de todo lo que se propone.
El martes, cuando llegue a casa deje mi mochila con el móvil, y todo (cartera y todo lo demás) en casa y baje el plástico al contenedor y metí dentro las llaves que llevaba en la otra mano. Así que me quede alucinada y volví entrando al portal por la vecina de arriba que la dije que era Paloma y no podía entrar. La explique al vecino de al lado lo que me había pasado y llame con su móvil a mamá, que tenia una copia de mis llaves. Fui andando hasta su casa y me cogí un taxi de vuelta porque hacia ya frío. Gracias a mis vecinos que son maravillosos y con los que me llevo muy bien pude solucionar el problema.
A PESAR DE TODO, YO SIGO ANIMADISIMA PARA SEGUIR ADELANTE.
